El calcio

¿Cuántas veces no nos habremos planteado si tomamos suficiente cantidad de calcio y nos hemos respondido que sí? Pues lamentablemente, lo normal es que no, que no tomemos calcio en cantidad suficiente para nuestro organismo.

En la reunión de ayer de entulínea, nos hablaron precisamente de eso, del calcio, y debo decir que me pareció un tema súper interesante ya que descubrí cosas importantísimas.

¿Cómo saber la cantidad de calcio que debemos tomar diariamente? Pues habrá muchas formas de saberlo, pero os voy a proponer un test que he encontrado navegando por la red.

click para hacer el test

¿Qué resultado habéis obtenido? Yo tomo la mitad del calcio que mi cuerpo necesita... me he sorprendido, en serio, porque yo siempre he pensado que mi aporte de calcio era muy alto...

Bueno, pues vamos a estudiar el tema un poco más en profundidad ¿os apetece? 

Lo primero de todo, ¿qué es el calcio?

Segun la Wikipedia: 

El calcio es un elemento químico, de símbolo Ca y de número atómico 20.

Se encuentra en el medio interno de los organismos como ion calcio (Ca2+) o formando parte de otras moléculas; en algunos seres vivos se halla precipitado en forma de esqueleto interno o externo. Los iones de calcio actúan de cofactor en muchas reacciones enzimáticas, intervienen en el metabolismo del glucógeno, y junto al potasio y el sodio regulan la contracción muscular. El porcentaje de calcio en los organismos es variable y depende de las especies, pero por término medio representa el 2,45% en el conjunto de los seres vivos; en los vegetales, sólo representa el 0,007%.
En el habla vulgar se utiliza la voz calcio para referirse a sus sales (v.g., esta agua tiene mucho calcio; en las tuberías se deposita mucho calcio, etc.)

Con otras palabras, el calcio es un elemento quimico que contribuye notablemente en el correcto funcionamiento de nuestro organismo.

Una persona adulta, tiene en su cuerpo, aproximadamente un kilogramo del calcio, del cual, el 99% se encuentra en los huesos y dientes ¿Y qué hay del otro 1%? Pues lo empleamos en otras funciones metabólicas básicas como la transmisión nerviosa, el ritmo cardiaco, para contener la irritabilidad, mantener el tono muscular...

¿En qué alimentos podemos encontrar el calcio?

En varios grupos, el más común y conocido por todos, es en los lácteos: 

- Leche de vaca entera, semidesnatada, desnatada, en polvo, condensada...

- Quesos frescos, curados, semicurados, en porciones, para untar, batido, mantequilla...

- Yogures desnatados, semidesnatados, enteros,  petit suisse, mousse de yogur, natillas, flanes...

- Helados, batidos...

Pero encontramos también calcio en otros grupos de alimentos como por ejemplo en los pescados, mariscos y crustáceos:

- Sardinas frescas, en tomate, en aceite... boquerones con espinas, berberechos al natural, mejillones, gambas y camarones, vieiras, percebes, pulpo, ostras, langostinos, gambas, almejas, chirlas...

Las legumbres son también ricas en calcio:

- Judías blancas, pintas o negras, garbanzos, lentejas, soja.

Y algunas verduras también lo contienen:

- col rizada, cebolla, berro, cardo, acelga, grelos, brócoli...


De frutas:

- Las cerezas, frambuesas, higos, brevas, naranja, kiwi

Los huevos, los frutos secos en general y el chocolate son también una buena fuente de calcio.

Pero hay que tener cuidado porque algunos alimentos nos "roban" ese calcio que ingerimos. Por ejemplo las espinacas y la remolacha, el café, el té, la coca cola (en general todos los productos que contengan cafeína). Así como también la sal, el tabaco y el alcohol nos hacen disminuir la asimilación del calcio ingerido.

Quiere decir que esa costumbre que tenemos de tomarnos por las mañana nuestro café con leche, quiza nos sea la más adecuada, ya que nos despierta, pero impide que todo el calcio que tomamos nos llegue sano y salvo... una parte se pierde por el camino debido a la cafeína. Curioso ¿verdad?

Pero, como positivo decir que el calcio se fija en nuestros huesos de una forma muy sencilla. ¿Vamos a ver cómo sacar el máximo rendimiento al calcio que ingerimos?

Para que el calcio se fije bien en los huesos y su absorción en el organismo se produzca de forma adecuada, se necesita: la vitamina D, la exposición a los rayos solares, el adecuado funcionamiento de la glándula tiroides y la actividad física. Por ejemplo podemos favorecernos dando un paseo al sol ¿os parece complicado? A mi todo lo contrario, lo veo una forma muy agradable de cuidarme.